“ella es Anna….mi mejor amiga”
¿En que estaba pensando cuando decidí traerlas a ambas?, creo que en serio sería imposible tratar de que estas chicas se llevaran bien y en cierto modo aun tenía esa pequeña esperanza viva dentro de mí.
Todo el camino de ida al aeropuerto se la pasaron insultándose, bueno, no como tal, sino insultándose con las miradas asesinas que se dirigían la una a la otra. No hacían falta palabras para poder adivinar el significado de esas miradas que me hacían sentir en verdad como el clásico punto neutro impotente.
Al llegar multitudes de gente entraban por las puertas de llegada y multitudes de gente se arremolinaba en las puertas de salida, era clásico esto en los aeropuertos. Diversas quejas se oían desde el lugar del equipaje y diversas quejas silenciosas de protesta se sentían a cada lado mío provenientes del agua y el aceite que me acompañaban. Los minutos pasaban y esto se hacía cada vez más incómodo, y para no perder mi poca paciencia que me quedaba decidí enfocarme solo en la pantalla que anunciaba los vuelos de llegada.
-He, Danni….te dejo sola un momentito, tengo que ir a donde la reina va sola ¿ok?.- musitó Anna de repente haciéndome sobresaltar.
Yo solo asentí dedicándole una sonrisita forzada.
-ojalá se valla por el caño y no regrese.- dijo Carol después de que Ann se fuera. Yo la miré con cara de pocos amigos.
-en serio, parecen como agua y aceite, yo creo que si se dieran la oportunidad de conocerse tal vez y…
-no, tal vez y nada –Dijo interrumpiéndome –ya te lo dije, esa Anna me da mala espina. Es una de esas personas que con solo verla te da un aire de mala vibra.
-pfff, nunca pensé que fueras tan supersticiosa Carol
-no es superstición- contestó tajante
-mmmm, pss entonces ¿a eso como se le llama?-pregunté sarcásticamente
Ella se quedó pensativa por unos segundos, pero ni siquiera me contestó.
El reloj marco las 4 de la tarde en punto e instintivamente mi mirada se dirigió a la puerta de llegadas….entraban personas y más personas…pero ninguna era Bill ni Tom.
-¿ya llegaron?- preguntó Anna impaciente a mis espaldas. No me había dado cuenta que ya estaba de nuevo con nosotras.
-no, aún no.- respondí
Demasiada gente hacía que me sintiera mareada, pero de pronto mi mirada se enfoco en alguien demasiado inconfundible. Su estatura hacía que se distinguiera de todas las personas que pasaban junto de él.
“Bill”, grité para mis adentros. Y sin pensarlo 2 veces me adentré entre toda aquella multitud para poder acercarme a él.
-Hey! Dánica ¿dónde vas?.- gritó detrás de mi Carol.
Miré hacia atrás para hacerle señas a mis amigas que se me quedaran ahí, pero entendieron lo contrario y se abrieron paso entre la gente siguiéndome.
-NARRA BILL-
Había demasiadas personas revoloteando a mí alrededor, tal vez sería mejor dirigirme a un lugar un poco más tranquilo mientras esperaba a que Tom se dejara de niñerías y dejara de preguntar por esa azafata que tanto le gustó. Claro, era mi hermano y nunca iba a cambiar a menos que en serio alguien llegara a gustarle de buena manera. Por ahora él solo prefería esas clásicas relaciones esporádicas en las que solo saciaba su necesidad de placer. ¿Cuándo iba entender que hay una gran diferencia entre el placer del solo sexo y el placer de sentir el amor verdadero?, claro, y obviamente, ambos en algún momento serían el complemento del otro.
Mis guardaespaldas me guiaron al lugar mas tranquilo que encontraron en aquel muy demandado aeropuerto, y di gracias a que por ningún lado se veían señales de paparazis o de entrevistadores incómodos.
Me senté en una butaca de plástico rojo que había en ese cubículo mientras que de mi mochila sacaba mi muy amada Mac. La compañera infalible en todos mis viajes. Bueno infalible hasta que llegábamos a un lugar donde conectarse a internet era prácticamente imposible.
-Bill, ¿quiere que vaya a traer a su hermano o desea esperarlo?.- preguntó Frank, uno de mis 2 guardaespaldas.
-hem, solo contacte a Denis y dígale que si es necesario, lo traiga a rastras.- contesté sin despegar la mirada de la pantalla de la laptop.
Frank dio dos pasos hacia atrás y saco su radio para darle el recado al guardaespaldas de Tom.
-Frank, ¿puedes venir un momento?.- llamó el otro guardaespaldas quien, por ahora no me acordaba muy bien de su nombre, ya que era nuevo…muy amigo de Frank por cierto.
El guardaespaldas acudió a su llamado y salió del cubículo, y después de unos cuantos segundos volvió a entrar en compañía de alguien.
-una sincera disculpa, lo que pasa es que es nuevo y…
-jejeje, no te preocupes Frank…solo hace su trabajo.- dijo una voz melodiosa demasiado familiar. Mi corazón dio un respingo de felicidad y rápidamente me volví hacía ella.
-Princesa!!!.- grité de asombro, no esperaba encontrármela aquí.
Corrí hacia ella y la abracé.
-Amor, te extrañe mucho.- me dijo ella sin despegar su rostro de mi pecho.
-y ¿crees que yo no?.- le contesté mientras le daba un beso en la frente.- justamente, saliendo de aquí planeaba ir a verte.
-bueno, creo que te gané –Musitó entre su adorable risa.
-si, eso creo.-dije mientras entrelazaba sus dedos con los míos y quedábamos frente a frente mirándonos como si ciegos que veían la luz por primera vez. Sus ojos tenían un brillo especial que me volvían loco.
-y ¿Tom?.- preguntó mirando hacia todos lados.
-hum, por ahí anda, creo que ya consiguió ligue para esta noche.
-Hay, cuando no…..- dijo poniendo los ojos en blanco.
Carol entró al cubículo en ese momento y en su rostro se marcaba una tímida sonrisa de satisfacción.
-Hey!!!!¿¡¡PORQUE YO NO PUEDO ENTRAR!!?.- se escuchó la voz enojada de una chica fuera del cubículo.
-Hola, Bill.- saludó ella con la clásica voz temblorosa que la caracterizaba.
-Carol!!!, Hola.- respondí al saludo de esta chica que me caía muy bien a pesar de que su timidez en ciertas ocasiones era más fuerte que ella misma.
Miré a Dánica que en ese momento se la quedaba viendo con una cara de desaprobación y meneaba la cabeza.
-¿Qué sucede? – pregunté confundido mientras ella se dirigía a la entrada del cubículo y le decía algo a Frank. Yo la seguí
-EXIJO QUE ME DEJEN ENTRAR, MI AMIGA ESTA AHÍ ADENTRO.- pedía una chica a la que yo desconocía. Era delgada de cabello obscuro y parecía muy molesta.
Dánica se puso al lado de la chica y le pidió que se tranquilizara. Ella solo se limitó a ver feo a mis guardaespaldas y de paso a echarle una mirada asesina a Carol que se asomaba desde el cubículo. Y si mi memoria no me fallaba, Danni me había comentado que su amiga estaba de visita…probablemente ella debía ser. Así que decidí interceder.
-Esta bien Frank.- dije tranquilamente para que la dejaran pasar.
-Bueno, ella es Anna, mi mejor amiga .- la presentó Dánica
-es un placer, mi princesa me ha contado mucho de ti.- musité mientras le tendía la mano.
-nonono, el placer es T-o-d-o mio.- contestó la interpelada correspondiendo a mi saludo con una extraña sonrisa en su rostro que no pude interpretar.
anna .. su mejor amiga y carol ... u.u si carol escucharia eso .. se le romperia el corazon .. seria orrible .. creo q danica .. se confundio ...
ResponderEliminarbill llego .. wii .. hay tom ... con la azafata xdddd .... espero q tom tmb encuentre el amor .... espero el proximo cappp ame el cap .. amo tu di :DDD
:D gracias x leer!!! tambien tu Fic zta super..oyee un favor...me ayudarias a recomendar mi fic xfiss...:)
ResponderEliminar